Flan reina Ana

Calentar el horno hasta una temperatura moderada de 180°C.

Enmantecar una fuente para horno, de vidrio térmico, de veintidós centímetros de diámetro, con la cucharadita de manteca.

Poner la vaina de vainilla y la leche dentro de una cacerola de tamaño mediano. Ubicar el recipiente sobre fuego moderado y calentar la leche (llevarla hasta casi el punto de ebullición). Retirar la cacerola del fuego, taparla y dejarla aparte para que la leche tome el sabor de la vainilla durante veinte minutos. Retirar la vainilla, secarla y reservarla para usarla en otra ocasión.

Colocar las yemas de huevo, los huevos y el azúcar dentro de un bol a prueba de fuego. Llenar una cacerola grande hasta la mitad con agua hirviente y ubicar el bol dentro de la misma. Poner ambos recipientes sobre fuego moderado. Batir la preparación de huevos con un batidor de alambre o uno giratorio hasta que esté espesa y haya adquirido un color amarillo pálido.

Retirar la cacerola del fuego y quitar el bol del agua. Incorporar la leche en forma gradual revolviendo sin cesar con una cuchara de madera.

Colar dejando caer la preparación dentro de la fuente enmantecada. Llenar una asadera hasta la mitad con agua hirviente. Ubicar el recipiente que contiene el flan dentro de la asadera y llevar al horno. Cocinar durante cuarenta o cincuenta minutos o hasta que al introducir un cuchillo en el centro al retirarlo la hoja quede totalmente limpia. Retirar la asadera del horno y quitar el recipiente de la asadera. Aumentar la temperatura del horno a 220°C.

Bañar la parte superior del flan con el licor de naranjas, utilizando una cuchara. Decorar con el merengue. Colocar nuevamente el recipiente dentro del horno y cocinar durante cinco minutos o hasta que el merengue se haya dorado ligeramente.

Retirar el recipiente del horno. Espolvorear el flan con la cáscara de naranja rallada y servir de inmediato si se desea saborear el postre caliente.