Cerdo a la cacerola con limón

Colocar la harina sazonada sobre un plato y recubrir los trozos de carne de cerdo con la misma, sacudiéndolos para quitarles cualquier exceso. Dejarlos a un lado.

En una cazuela grande a prueba de llama, calentar el aceite sobre fuego moderado. Cuando esté caliente, agregar el ajo y las cebollas y cocinarlos de cinco a siete minutos hasta que las cebollas estén blandas y transparentes pero no doradas, revolviendo de vez en cuando. Con una espumadera, pasar las cebollas y el ajo a un plato. Dejar a un lado.

Incorporar los cubos de carne de cerdo a la cazuela, de a pocos por vez, y freírlos durante seis u ocho minutos hasta que estén ligeramente dorados en toda su superficie, dándoles vuelta con frecuencia. Con la ayuda de una espumadera, pasar los cubos a un plato a medida que se vayan dorando.

Colocar las cebollas y el ajo nuevamente dentro de la cazuela. Añadir el apio y el caldo de gallina. Aumentar el fuego al máximo y llevar el caldo a hervor, revolviendo constantemente. Agregar los cubos de carne de cerdo y, cuando la preparación alcance nuevamente el hervor, reducir el fuego al mínimo. Incorporar la mejorana, el tomillo, la cáscara y el jugo de limón y revolver. Tapar el recipiente y cocinar la carne lentamente durante cincuenta minutos hasta que esté tierna al pincharla con la punta de un cuchillo afilado.

Retirar y descartar la cáscara de limón. Aumentar el fuego a moderado, agregar el limón picado y revolver. Incorporar la manteca ablandada en trozos pequeños, revolviendo continuamente y cuidando que cada porción haya sido totalmente absorbida antes de añadir la siguiente. Reducir el fuego al mínimo y cocinar la salsa lentamente durante dos minutos. Retirar la cazuela del fuego y servir de inmediato.