Delicias turcas

Enmantecar una asadera de quince centímetros por quince con la cucharadita de manteca y dejarla a un lado.

Colocar el azúcar, el agua y el jugo de limón en una cacerola mediana de base pesada. Ubicar el recipiente sobre fuego al mínimo y revolver preparación con una cuchara de madera hasta que el azúcar se haya disuelto.

Aumentar el fuego y llevar el almíbar a hervor. Hervir la preparación hasta que registre una temperatura de 120°C en un termómetro para azúcar o hasta que una pequeña cantidad de la misma depositada dentro de un bol lleno de agua fría forme una bolita dura. Retirar el recipiente el fuego y dejar descansar el alambre durante diez minutos. Incorpore la gelatina disuelta y la esencia de vainilla y batir con una cuchara de madera hasta que la preparación esté mezclada.

Verter la mitad de la mezcla dentro de la asadera enmantecada. Incorporar el agua de rosas y el colorante rojo al resto de la preparación y revolver. Verter la preparación coloreada dentro de la asadera y dejar a un lado en un lugar fresco durante ocho horas o durante toda la noche.

Tamizar el azúcar impalpable junto con la fécula de maíz dejándolas caer dentro de un plato. Desmol-dar la delicia turca sobre una tabla y cortarla en cubos de dos centímetros y medio de lado. Recubrir los cubos con la mezcla de azúcar impalpable y fécula de maíz; sacudirlos para desprender el exceso. Pasar las delicias turcas a una fuente y servirlas de inmediato o envolverlas en papel encerado o papel manteca y almacenarlas en un recipiente hermético hasta que se desee consumirlas.