Navarín de cordero

Derretir la mitad de la manteca en una cacerola grande, junto con 2 cucharadas de aceite, a calor moderado. Agregar el ajo y los cubitos de carne, de a pocos por vez. Freír revolviendo de cuando en cuando durante 6 u 8 minutos o hasta que estén dorados.

Retirar los cubitos con una espumadera y mantenerlos al calor mientras se fríe el resto.

Retirar la cacerola del fuego y volcar la mitad de la grasa. Volver la carne a la cacerola y espolvorearla con harina, sal y pimienta. Poner a calor moderado y cocinar revolviendo constantemente durante unos minutos. Incorporar el puré de tomates y el caldo. Aumentar el fuego y hacer hervir a fuego fuerte. Reducir el calor, agregar el bouquet garni, tapar y dejar cocinar muy lentamente durante 1 hora. Mientras tanto, derretir el resto de la manteca y del aceite en una sartén a calor moderado. Agregar las cebollas y papas y freír, removiendo cada tanto hasta que las verduras se doren un poco.

Retirar del fuego y sacar las verduras con una espumadera poniéndolas en una fuente. Reservar.

Quitar la grasa que se forme en la superficie usando una cuchara de mango largo. Agregar a la cacerola las cebollas y papas. Dejar cocinar a fuego muy suave, tapado, de 20 a 25 minutos o hasta que las verduras y la carne estén tiernas al pincharlas.

Retirar la cacerola del fuego. Quitar con una cuchara de mango largo la grasa formada en la superficie del líquido de la cocción. Retirar y descartar el bouquet garni.

Pasar el guiso a una fuente precalentada y servir inmediatamente.

Servir con una ensalada fresca de verduras (lechuga, berro o tomates), pan blanco crocante y un vinto tinto seco de mucho cuerpo.