Pastel de cerezas 1

Tamizar la harina y la sal en un bol mediano. Agregarle el azúcar y mezclar. Incorporar 2 cucharadas de manteca y la margarina. Usando la yema de los dedos, unir la manteca y la margarina a la harina hasta que la mezcla parezca miga de pan fina. Hacer un hoyo en el centro de ella y agregar las yemas mezcladas con 1 cucharada de agua helada. Con las manos mezclar los ingredientes hasta formar una masa suave. Agregar más agua helada si la masa está muy seca.

Darle forma de un bollo, envolverla en papel encerado y enfriarla durante 15 minutos en la heladera.

Calentar previamente el horno a temperatura moderada (180°C). Enmantecar una fuente de pastel mediana con el resto de manteca. Descargar las cerezas, ponerlas en la fuente reservando 180 cm3 del jugo. En una cacerola mediana, calentar el jugo con el azúcar granulado la esencia de vainilla y la fécula de maíz, a fuego moderado hasta que la mezcla hierva. Agregar las cerezas y cocinarlas durante 1 ó 2 minutos hasta que estén calientes y el líquido espeso. Dejar la cacerola en un lugar fresco. Sacar la masa de la heladera y dividirla en dos partes: una mayor que la otra. Sobre una superficie enharinada, estirar el trozo mayor hasta que quede delgado. Forrar con él la fuente. Volcar dentro con una cuchara el relleno de cerezas, esparciéndolo uniformemente.

Estirar el resto de masa en forma de círculo un poco mayor que la fuente. Colocar este círculo sobre el relleno; unir los bordes de las dos masas con los dedos. Hacer dos o tres hendiduras en la masa. Pintarla cor. la clara de huevo. Cocinar en el centro del horno durante 40 minutos o hasta que la masa esté bien dorada. Servil caliente o frío, indistintamente.