Golosinas israelíes

Calentar el horno hasta una temperatura moderada de 180°C. Enmantecar dos placas para horno con la cucharadita de manteca y dejarlas aparte.

Tamizar la harina junto con el polvo para hornear y la sal dejándola caer dentro de un bol grande.

Formar un pozo en el centro y colocar los huevos dentro del mismo. Mezclar y amasar la preparación con las manos hasta que esté suave.

Dividir la masa en seis trozos. Extender cada trozo en forma de un rollo largo y delgado, de aproximadamente 2 cm de espesor y quince centímetros de largo. Cortar cada trozo en seis rebanadas.

Ubicar las rebanadas de masa sobre las placas enmantecadas. Colocar las placas en el horno y cocinar durante quince o veinte minutos o hasta que la masa esté ligeramente dorada,

Retirar las placas del horno y dejarlas aparte.

Poner la miel, el azúcar, el jenjibre. la nuez moscada, las nueces y las almendras dentro de una cacerola grande. Ubicar el recipiente sobre fuego moderadamente fuerte. Cocinar durante diez minutos o hasta que el almíbar hierva; revolver con frecuencia. Reducir el fuego a moderadamente bajo y dejar caer las rebanadas de masa dentro del almíbar. Cocinar durante cinco o diez minutos o hasta que la preparación esté dura, sin dejar de remover.

Retirar el recipiente del fuego. Empleando una cuchara, traspasar la preparación a una superficie de trabajo humedecida; luego dejarla enfriar hasta que pueda tomarse con las manos.

Desprender trozos pequeños de la preparación y darles forma de cono.

Ubicar los teiglach, bien separados unos de otros, en una fuente para llevar a la mesa y dejarlos aparte para que se enfríen totalmente antes de servirlos.