Guiso de rabo

Calentar el horno hasta una temperatura de 170°C.

Recortar los trozos de rabo y descartar la grasa sobrante. Espolvorearlos con la sal y la pimienta negra. Recubrirlos con la harina y sacudirlos para desprender cualquier resto innecesario.

En una sartén grande y pesada derretir la grasa vegetal sobre fuego fuerte. Cuando esté caliente bajar el fuego a moderado e incorporar los trozos de rabo de a pocos por vez. Cocinarlos hasta que estén dorados, dándolos vuelta con frecuencia. Traspasar la carne a una cazuela grande a prueba de llama.

Agregar las zanahorias, los nabos,el apio y las cebollas a la sartén y agregar más grasa si fuera necesario. Cocinar a fuego moderado durante quince minutos o hasta que los vegetales estén ligeramente dorados, revolviendo a menudo.

Colocar los vegetales sobre los trozos de rabo dentro de la cazuela. Añadir el caldo, la hoja de laurel, el tomillo y el perejil. Ubicar el recipiente sobre fuego fuerte y llevar el líquido a hervor.

Tapar la cazuela y ubicarla en el centro del horno. Cocinar durante cuatro horas aproximadamente o hasta que la carne se desprenda fácilmente del hueso.

Empleando una cuchara grande, retirar la grasa de la superficie de la preparación. Probar el guiso y añadir más sal y pimienta si fuera necesario. Servir de inmediato.

El guiso de rabo es una comida particularmente fuerte y nutritiva, por lo cual es muy poco recomendable para servir en los meses de verano o en climas calurosos. De todos modos puede atenuarse su efecto sirviéndola con ensaladas frescas poco condimentadas.